Lo dejo por imposible
Tras llevar sobre un 60 por ciento, abandono. Algunos niveles y jefes son difíciles y no tengo problema con eso, lo intento hasta que me lo pase. Pero cuando un jefe está implementado de manera tramposa y desesperante como la serpiente que hay que matar con barriles de ácido, lo dejo. No funciona bien el mecanismo de sacar el barril. Encima hay que usar el empujón a toda velocidad y cuando hay que hacerlo tan deprisa, la mayor parte de las veces falla el control. Una pena, porque por lo demás es un gran juego.